Del único modo de atraer a todos los pueblos a la verdadera religión

Casas, fray Bartolomé de las

ISBN: 9789681638450 | Clave FCE: 015137R

$110.00 (Precio de lista, únicamente informativo)

Este tratado, impreso por primera vez en 1942 (en edición bilingüe latín y español) y justamente reputado como una de sus grandes obras, apela a verdades universales y desarrolla una doctrina precisa en defensa de la razón cristiana.

Presentación: RUSTICO
Peso 0.15 kg
Idioma ESPAÑOL
Idioma original OTRO
Editorial FONDO DE CULTURA ECONÓMICA (FCE)
Año de edición 1975
Colección COLECCIÓN POPULAR
Área temática HISTORIA

fray Bartolomé de las Casas ; advertencia prelim. de Agustín Millares Carlo ; introd. de Lewis Hanke ; trad. de Atenógenes Santamaría

Del único modo de atraer a todos los pueblos a la verdadera religión 2ª ed. - - México : FCE, 1975.
479 pp.; 17 x 11 cm, Colección COLECCIÓN POPULAR
1.Iglesia Católica - Obras Doctrinales

  • fray Bartolomé de las Casas ; advertencia prelim. de Agustín Millares Carlo ; introd. de Lewis Hanke ; trad. de Atenógenes Santamaría

    Nació en Sevilla en 1484. Hijo de un panadero de apellido Peñalosa y su mujer de apellido Casaús (castellanizado en Las Casas). Cursó estudios en Sevilla y Valladolid. A los 19 años, con su padre, acompañó a Cristobal Colón en su segundo viaje a América. Ingresó en la Orden de Santo Domingo. De vuelta a La Española, en 1502, para trabajar en la conversión de los indígenas, fue ordenado sacerdote, Allí conoció bien el sistema de las encomiendas territoriales, que los conquistadores aplicaron a su antojo. Resultado de aquellas prácticas fue la esclavización de los indígenas y la despoblación de sus tierras. A fin de poner término a las anormalidades a que daba lugar el reparto de los indios,regresó a España, donde convenció al cardenal Cisneros para que enviase a La Española una comisión con el fin de investigar sobre los hechos y abusos denunciados. Las intrigas y la ineficacia de esta comisión hicieron que fracasara su gestión y Las Casas volvió de nuevo a España a adopción de las más enérgicas medidas para la protección de los indígenas. El Gobierno adoptó, por fin, las ideas que había concebido para prevenir los males que denunciaba. Solicitó a Carlos V la concesión del territorio que se extiende a lo largo de la costa, desde el golfo de Paria hasta la frontera occidental de esta provincia, hoy conocida como Santa Marta. Propuso formar una colonia compuesta de cultivadores, artesanos y eclesiásticos esperando civilizar en el plazo de dos años 10.000 indios e instruirlos en las artes útiles para poder sacar de su arte y de su industria 15.000 ducados de renta para la Corona de Castilla. Se firmaron las Capitulaciones y se hizo a la mar en 1520. La empresa fracasó por lo que se refugió en un convento de dominicos de Santo Domingo donde se consagró a la obra de las misiones y dio comienzo a su Historia general de las Indias (1552-61). Hizo un nuevo viaje a España (1539), encargado de una misión de su Orden y con objeto tambien de obtener, de nuevo, apoyo y ayuda para los indios. Carlos V le prometió que los indios serían tratados como súbditos y no como esclavos. En 1544, embarcó por quinta vez hacia América negándose a dar la comunión a los españoles que después de promulgadas la nuevas leyes siguieron teniendo en la esclavitud a sus colonos indígenas. En 1545 fue nombrado Obispo de Chiapas, en México, cuya diócesis regentó hasta 1547, fecha en la que de nuevo volvió a España,cuando estaba a punto de aparecer la obra de Ginés Sepúlveda en la que hacía consideraciones sobre la guerra justa, sus causas y condiciones, y juzgando como tal a la que se había desarrollado contra los indios en América. Los dos autores se enfrentarón en Valladolid, en donde Las Casas defendió la tesis del carácter exclusivamente espiritual de la donación y la legitimidad de la soberanía de los indios. Con la obra de Las Casas dará comienzo la leyenda negra de la conquista de América. Falleció el 17 de julio de 1566 en Madrid.